SANTO DOMINGO.- La Dirección General de Aduanas incautó ayer miércoles un cargamento de municiones, pertrechos y armas en el muelle de Haina Oriental, las cuales fueron detectadas en operativos de la Supervisaría General de Seguridad Militar y el Departamento de Inteligencia Aduanera.
Asimismo, Aduanas decomisó durante el fin de semana drogas y varios artículos de marcas, los cuales fueron introducidos al país de manera ilegal por el Aeropuerto Internacional de las Américas José Francisco Peña Gómez (Aila), así como por los muelles de Haina y Caucedo y el puesto fronterizo de Dajabón.
Entre las armas y demás pertrechos encontrados en tres contenedores procedentes de los Estados Unidos, figuran dos rifles de aire de las marcas Magnum y Marlin, ambos calibres 22 milímetros, una culata también Marlin, y 895 balines calibre 22.
La DGA también se incautó de 480 cápsulas calibre 9mm, 50 cartuchos calibre 12, dos cargadores para rifles, así como un cerrojo de marca desconocida.
Las municiones y las armas fueron traídas al país por las compañías Martínez Cargo Express Corp. S.R.L., Oce Cargo Express S.R.L y GMPD Shippings. S.R.L., que se dedican al envío de carga desde Estados Unidos.
Mientras, en el puerto de Punta Caucedo, la DGA se incautó de 68 bultos de cargadores Samsung, gorras marca Lacoste, Air Jordan y relojes marca Jordan, los cuales estaban consignados a la importadora China Girasol.
También en el puesto fronterizo de Dajabón fueron encontrados en sacos de ropas usadas, siete paquetes, presumiblemente de marihuana, los cuales eran transportados por una ciudadana de origen haitiano.
En estos operativos, además de los organismos de investigación de Aduanas, participaron el Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), J-2 y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
El organismo dijo que estas acciones de «celosa vigilancia» se enmarcan dentro de los esfuerzos que realiza para enfrentar el contrabando, que atenta contra el comercio legalmente constituido, para enfrentar los ilícitos aduaneros en todas sus expresiones, que también ponen en riesgo la seguridad y salud ciudadanas y violenta las leyes que rigen el comercio transfronterizo.
